Los problemas de ortodoncia son muy frecuentes: casi nadie tiene unos dientes naturalmente perfectos. La maloclusión, a menudo denominada «mala mordida», puede afectar a la masticación, la higiene bucal, el habla y el aspecto general de tu sonrisa. Puede deberse a varios factores, como la genética, chuparse el dedo, enfermedades dentales, mala higiene bucal, accidentes, defectos congénitos u otras afecciones médicas. La buena noticia es que la ortodoncia puede abordar eficazmente estos retos, mejorando tanto la salud bucal como la confianza en uno mismo.
Comprender el problema concreto de ortodoncia que te afecta a ti o a tu hijo es un primer paso esencial para conseguir una sonrisa más sana y funcional. El tratamiento de ortodoncia con la Dra. Alexis Polczynski puede mejorar tanto la funcionalidad de tu mordida como la estética de tu sonrisa, garantizando resultados duraderos.
A continuación exponemos algunos de los problemas ortodóncicos más frecuentes y cómo pueden afectarte.
Protrusión de los dientes frontales superiores
Esta afección afecta tanto al aspecto como a la función de tus dientes. Se produce cuando los dientes superiores se extienden demasiado hacia delante, o cuando los dientes inferiores no se extienden lo suficiente hacia delante, lo que provoca una mordida desequilibrada.
Sobremordida
La sobremordida se produce cuando los dientes frontales superiores se extienden significativamente por encima de los dientes frontales inferiores. En casos graves, esta superposición puede hacer que los dientes inferiores muerdan el paladar, lo que provoca molestias y posibles complicaciones a largo plazo.
Mordida cruzada
En una mordida cruzada, los dientes superiores se asientan dentro de los inferiores. Esta desalineación puede interferir en el correcto funcionamiento de la mandíbula, provocando potencialmente un crecimiento desigual de ésta. Además, puede afectar a la posición del diente, causando potencialmente daños al diente y al tejido gingival circundante.
Prognatismo
La prognatismo se produce cuando la mandíbula inferior se extiende hacia delante, haciendo que los dientes frontales inferiores se sitúen por delante de los dientes frontales superiores. Esta desalineación puede interferir tanto en la masticación como en la estética facial.
Mordisco abierto
La mordida abierta se produce cuando los dientes frontales superiores e inferiores no se superponen, dejando un hueco cuando se cierra la boca. Esta afección puede afectar a la correcta masticación y fomentar hábitos como el empuje lingual, que pueden empeorar el problema con el tiempo.
Espaciado
Los problemas de espaciado se producen cuando hay espacios notables entre los dientes. Estos huecos pueden deberse a la falta de dientes o ser simplemente un problema estético que afecta a la armonía general de tu sonrisa.
Hacinamiento
El apiñamiento se produce cuando no hay espacio suficiente para que los dientes salgan correctamente de las encías. Hay muchos tratamientos posibles para el apiñamiento, pero la mejor opción se determina caso por caso.
